La nutrición es parte importante del tratamiento contra esta enfermedad, recuerda no darle más armas al no alimentarte bien. Para mi será un placer poder contarte un poco sobre la importancia que tiene el llevar una dieta balanceada para sentirte bien y luchar con todas tus fuerzas.
Una dieta y un estilo de vida saludables están asociados con la buena salud general. Ahora existen estudios que demuestran que la dieta y el estilo de vida pueden jugar un rol en el cáncer de mama y su recurrencia.
Las claves para una buena salud general incluyen:
Alcanzar y mantener un peso corporal saludable
Comer una dieta equilibrada
Hacer ejercicios regularmente
Dormir lo suficiente
Y por otro lado tenemos ciertos factores que hacen que una persona tenga más probabilidades de tener cáncer de mama no pueden cambiarse. Entre ellos:
Sexo femenino
La edad en la que tuvo su primer período
El aumento de la edad
Historial familiar
Genética
Tener sobrepeso o ser obeso
Falta de ejercicio
Beber demasiado alcohol
Fumar
Recuerda que la elección de tus alimentos en este proceso es muy importante, en distintos estudios se ha revelado el riesgo que conlleva el consumo de alimentos de bajos estándares de calidad sobre nuestro sistema inmunológico y digestivo, provocando mayor número de casos de cáncer en nuestro país.
Muchos de estos alimentos vienen disfrazados de comida “saludable” tales como los yogurts altos en grasas y en azucares, leche de vaca, jugos, enlatados y envasados.
Todo alimento que tenga conservadores conlleva un riesgo a la salud, ya que contiene forzosamente ingredientes no naturales que van modificando nuestras células y provocando diversas complicaciones.
Lo recomendable es elegir alimentos naturales, bajo en grasas saturadas y trans, cero azucares, no pre-cocidos, empaquetados o con algún proceso químico.
Preferir alimentos ricos en antioxidantes para favorecer la eliminación de células cancerígenas como: jengibre, te verde, cacao, amaranto, aguacate, semilla de chía, matcha, camote, maca, kale, almendras, entre otros.
Una dieta saludable es clave para que tu cuerpo funcione bien durante y después del tratamiento. Al comenzar la terapia una dieta saludable renova los tejidos y mantiene las defensas y fuerza ante las infecciónes y previene que los tejidos se descompongan. La nutrición saludable, tanto en el curso del tratamiento como después, ha sido vinculada con una mejor probabilidad de recuperación. Durante el tratamiento debes asegurarte que recibas todos los nutrientes que el cuerpo necesité. Puede que tu dieta durante el tratamiento no sea la misma que la dieta recomendada al público general. Por ejemplo, es posible que se necesite más calorías y las comidas que contienen más proteína.
¡No te preocupe! Lo más importante es que cada bocado cuente, así que si tu eres una de las guerreras contra el cáncer de mama, quiero decirte que no estás sola, somos muchos los especialistas en nutrición que podemos darte más armas para luchar. ¡Juntas somos capaces de todo!
Yorumlar